La Universidad Rey Khalid (KKU) se compromete, en todas sus políticas, decisiones y relaciones, a seguir un marco ético. También se rige por un conjunto de valores derivados de las enseñanzas de la religión islámica, adoptados por los líderes del país. Además, estos valores son coherentes con las políticas del Ministerio de Educación Superior y están en armonía con el objetivo de la KKU de convertirse en una universidad única y excelente. Por lo tanto, las preocupaciones de la universidad no se limitan únicamente a las actividades educativas, de investigación y de servicio comunitario, sino que aseguran que estas funciones se realicen dentro de un marco de valores éticos. Sin duda, la multifuncionalidad de la universidad, el aumento y la complejidad de las tareas, así como el incremento de las relaciones internas y externas, han hecho necesario establecer un marco ético que oriente y dirija el comportamiento de su personal, especialmente ante diversos puntos de vista sobre ciertos comportamientos. Este marco establece una serie de tendencias éticas, normas, responsabilidades, controles y advertencias que son aceptadas por la comunidad universitaria y que rigen las prácticas internas. Sin embargo, este marco ético difiere de los términos, normas o reglamentos en que representa un acuerdo explícito entre las partes sobre valores éticos y un conjunto específico de normas de conducta para diversas situaciones. Por ello, constituye un valor ético vinculante para todos.