La Universidad King Khalid, representada por la Decanatura de Asuntos Estudiantiles y la Unidad de Formación e Intercambio Estudiantil, ha lanzado el programa de formación de verano de este año, dirigido a estudiantes de distintas facultades y disciplinas académicas. Esta iniciativa tiene como objetivo proporcionar un entorno de formación que mejore las habilidades prácticas del alumnado y su capacidad para aplicar los conocimientos académicos en contextos reales.
El programa de este año incluye 14 itinerarios formativos diversos, implementados en colaboración con empresas internacionales, institutos de formación locales y universidades extranjeras. Se ofrece en modalidad presencial y a distancia, lo que permite mejorar la calidad de la formación y ampliar el acceso. El número de participantes superó los 3,000 estudiantes, distribuidos en los distintos programas según sus especialidades, asegurando que cada grupo reciba una formación adecuada y pertinente.
En este sentido, el decano de Asuntos Estudiantiles, el Dr. Ali bin Misfer Al-Qahtani, destacó que el programa es una de las principales iniciativas adoptadas por la universidad para fortalecer las competencias del alumnado y prepararlo para entornos profesionales que favorezcan su desarrollo laboral. Señaló que la universidad está comprometida con ofrecer oportunidades de formación de alta calidad que contribuyan a formar el carácter del estudiante y a desarrollar habilidades acordes a las exigencias del mercado laboral.
Agregó que el programa ha sido cuidadosamente diseñado para ajustarse a los requerimientos específicos de cada especialidad, tanto en contenido como en el tipo de formación. La distribución de los programas también se ha planificado estratégicamente para garantizar un impacto positivo en todos los grupos destinatarios. Subrayó que la universidad continúa trabajando en la mejora de estas iniciativas con el fin de elevar la calidad de sus resultados académicos y responder a las aspiraciones profesionales de sus estudiantes.
El Dr. Al-Qahtani explicó además que la experiencia práctica y la formación en campo son pilares fundamentales en la preparación del alumnado. Estas oportunidades permiten vincular el conocimiento teórico con la aplicación práctica, y desarrollar habilidades esenciales como la comunicación, la disciplina y el profesionalismo en entornos laborales reales, lo que hace que los estudiantes sean altamente competitivos. Afirmó que invertir en la formación estudiantil es uno de los aspectos más relevantes del desarrollo universitario, y que la decanatura trabaja activamente en ello mediante alianzas estratégicas a nivel local e internacional, así como una planificación meticulosa que responde a las necesidades reales de las especialidades y profesiones, ofreciendo así oportunidades reales de aprendizaje y crecimiento profesional.